13 de junio de 2013

Like a rolling stone

Si yo tuviera una hija como yo, creo que no sería ni la cuarta parte de buena como tú lo eres conmigo. Sera el amor de padre, no lo sé. Supongo que jamás lo entenderé. Así como nunca comprenderé la paciencia que me tienes, la insistencia en darme un beso o un abrazo aún cuando notas que yo no tengo muchas ganas, te boto, o te trato "como un perro" como dices tú.

Ahora que lo pienso, qué mala hija soy. Porque tú me das todo, absolutamente todo y yo no me doy los micro segundos para responderte un abrazo. Prometo cambiar. Es cierto que me das todo lo que te pido, me engríes siempre, me disculpas todo. Y no sé si lo merezco. Lo más probable es que no. Por eso este escrito es el regalo más insignificante que puedo hacerte.

Cuando gane millones o al menos lo suficiente, te regalaré todo eso que sé que secretamente quieres, en lugar de palabras: discos, videos y, bueno, medias. No sé si sabes que eres el mejor papá y el mejor hijo porque, valga la redundancia, tú también tuviste al mejor papá. Y lo tienes, porque el sigue contigo. Eres muy fuerte y si algún día no te tengo, me sentiría totalmente desprotegida. Eso, la protección, tu experiencia.

No sé lo que significa ver a un hijo llorar y sufrir tanto pero me imagino que debe ser algo duro. Cuando estuve mal, hace unos meses, no lo comprendía muy bien. Pero ahora lo entiendo: no habrá ningún hombre al que ame más que a ti. Y si encuentro a alguien, me aseguraré que tenga todas las virtudes que tú tienes (y que sea de la U). Sé que eres el hombre que nunca me haría daño, que jamás me traicionaría. Qué importante es tener un hombre así. Y yo lo tengo porque te tengo.

Hay demasiadas cosas que quiero agradecerte, porque sólo eso tengo para ti, gracias, mil  gracias y mucho amor. Tengo que agradecerte por mucho y disculparme por todo. Tengo que agradecerte por el padre de familia trabajador, emprendedor e impecable que eres. Tengo que agradecerte por lo gracioso y perfeccionista, porque gracias a ti es mi amor por la música, porque siempre tienes solución para todo, porque no te desesperas, porque para ti nada es imposible. Tengo que agradecerte por luchar tanto para que tengamos todo, por tus chistes y por siempre estar dispuesto a ayudar, por siempre tener una sonrisa. Por las veces que salimos a comprar y me esperas tres horas, porque siempre estás para mí. Pero en especial, tengo que darte las gracias por mi vida, porque yo soy más como tú que como otra persona. Por tu culpa son mis ojeras o mis inexistentes cejas y pestañas. Pero también por ti es mi pelo tan ondulado, que es lo que, creo, más me identifica. Porque sea como sea, siempre que se sepa que soy tu hija, me identificaré y reconoceré como la más orgullosa de las mujeres.



''Tan joven y tan viejo.... like a rolling stone''



1 comentario:

''Detrás está la gente''